martes, 15 de julio de 2014

ENCUENTROS QUE DEBERIAN SER MAS ASIDUOS

Corría el mes de Agosto del 2005 y se me venía el 30 de Setiembre y con el los 50 años, arriba del lomo. Me agarraba en una etapa muy especial, anímicamente estaba con unas ganas bárbaras de festejar junto a los amigos hechos durante esos 50 años. Por otro lado las peladeras eran de aquellas, y además en mi idea de festejo no me andaba con chiquitas, era mucha la gente a invitar y no quería que faltaran los músicos amigos, con los que tantas veces bailé.
LA UNIÓN